La
nacionalidad venezolana, surgida a partir del 5 de julio de 1811 y ratificada
con la Constitución Federal de dicho año, arropó a un caballero oriundo de la
villa de Santa María del Puerto de Príncipe (hoy Camagüey, Cuba) quien, con
apenas 9 años de residencia en el país, pasó de ser “uno más” a convertirse en
actor principal de cada una de las fases del proceso de emancipación y
consolidación del edificio republicano. Francisco Javier Yanes (abogado,
estadista, historiador, periodista, catedrático) está entre los próceres de la
independencia que con mayor diversidad de roles aportó talento y esfuerzo a la
construcción de la identidad nacional.
Su labor como fundador.
Nació
12 de mayo de 1777 en una familia de las muchas que en las Indias españolas
disponían de rancio abolengo y prestigio, pero pocos recursos económicos. Llegó
a Caracas el 9 de mayo de 1802 traído por su tío, el Dr. Francisco Javier
Socarrás, médico y boticario cuyo consultorio y farmacia quedaba en la esquina
que hasta hoy lleva su apellido en la bulliciosa capital venezolana. El 28 de
junio de 1806 obtuvo el título de Licenciado en Derecho Civil y Canónico
expedido por la Real y Pontificia Universidad de Caracas. Contrajo nupcias con
María de Socarrás y Venza, hija adoptiva de su tío, apenas 10 días antes de los
sucesos del 19 de abril de 1810
.
Inmediatamente se involucró en los movimientos políticos que a partir de ese
día iniciarían la transformación de la vida social y cultural de la hasta
entonces poco reluciente Capitanía General de Venezuela. El 14 de agosto del
citado año, Yanes se encontrará entre los fundadores de la muy activa y
virulenta Sociedad Patriótica.
La
Junta Suprema de Caracas lo comisiona “para
llevar la armonía y la concordia a la villa de Araure y sus dependencias e
impedir que cundiera en ellas el germen reaccionario que operaba en Coro, por
consecuencia de los sentimientos personales que dividían a aquellos habitantes.
Yanes obró con tal cordura que, pronto, volvieron las cosas a su aplomo,
calmándose las pasiones y puestos ya en son de reconciliación, le llegaron al
Marqués del Toro, que tenía su cuarten en Carora, trescientos hombres
voluntarios, suficientemente equipados por los vecinos de aquel distrito
capitular.”. El informe presentado a su comitente, el 24 de septiembre de 1810, le valió las
felicitaciones por sus acertadas y fructíferas gestiones.
El
prestigio ganado entre los habitantes de aquella jurisdicción llanera hizo que
en diciembre del mismo año lo escogieran como su Diputado a lo que sería el
primer Congreso Constituyente de Venezuela; en cuyo seno sobresalió por sus
bien fundamentados y elocuentes discursos a favor de la independencia absoluta.
El 5 de julio de 1811 está entre los declarantes de esa independencia, la cual dos
días después fundamentó sus razonamientos ante el mundo en el Acta redactada
por Juan German Roscio y Francisco Isnardi que sería aprobada por el soberano
Congreso y firmada por los Diputados, entre ellos Francisco Javier Yanes.
También se encuentra su firma aprobando lo que sería la primera Constitución de
Hispanoamérica, misma que con gran dificultad intentó dar cohesión jurídica a
la incipiente nación venezolana. Su condición de fundador de república está
igualmente ganada por ser integrante de la comisión encargada de redactar el
primer Código Civil y Criminal del país, e integrante también de la primera Sala
de Justicia Ordinaria, valga decir tribunal, que se instituyo en la República, cuyo
primer fin era juzgar a los sublevados de Valencia.
Participará
luego en la refundación de la República en 1830 cuando la desintegración de la Colombia
bolivariana sea confirmada por el Congreso Constituyente de Venezuela, del cual
fue Diputado y presidente.
Su labor como soldado.
Los
todavía no fraguados cimientos legales de la República encontraron pronto
resistencia en buena parte del territorio de la Capitanía General; al
alzamiento de los canarios de Caracas el mismo julio de 1811 y la sublevación
de Valencia, se sumó la llegada del capitán Domingo de Monteverde el 8 de
febrero de 1812. Este año trágico tuvo su clímax entre junio y julio cuando la
confusión, la suspicacia y la decepción reinaron entre los oficiales,
personeros y simpatizantes de la independencia desde 20 de junio (fecha de la
primera derrota de Monteverde en La Victoria) hasta el 12 de julio de 1812 (en
que se aprueba por parte de las autoridades republicanas iniciar conversaciones
para finalizar la guerra) debido a un sin número de sucesos fatídicos que se
conjugaron.
Todo ese estado de efervescencia emocional llega a su punto de hervor al
agregársele el nerviosismo causado por la súbita firma de un tratado de
Capitulación el 25 de julio de aquel año, en el cual todos sus términos
quedaban sujetos a la buena voluntad del jefe monárquico, Monteverde, sin
mayores ventajas para el bando republicano. Así, el 30 de julio de 1812 el
puerto de La Guiara era un desparrame de gente intentado embarcase con destino
incierto para salvar sus vidas e intereses de lo que creen, no sin razón, será
el inicio de fatídicas retaliaciones.
Entre
aquellos pasajeros sin destino iba Francisco Javier Yanes, quien logra llegar
hasta Curazao, de donde pasó más tarde a Cartagena y de allí a los llanos de
Casanare y luego al Apure, punto en el que junto con Francisco Serrano, Rafael
Urdaneta, Manuel Roergas de Serviez y Francisco de Paula Santander constituyeron
un efímero gobierno para Venezuela, el cual fue desconocido por los llaneros,
que solo aceptaban la autoridad de Páez.
Había
llegado el momento en que los razonamientos jurídicos, éticos y morales no
bastaban para sostener el intento republicano; y Yanes también aceptó su
responsabilidad de ocupar un puesto en la lucha armada. Tuvo su bautizo de
fuego en las acciones de El Yagual (11/10/1816) y en la toma de Achaguas. También
sirvió bajo las ordenes de Pedro Zaraza en 1817.
Su labor como jurista.
La
actuación de Yanes como legislador dejó en claro sus sólidos conocimientos del
derecho. Esto le valió un connotado reconocimiento de quienes ostentaban la
autoridad en determinados momentos del amalgamamiento nacional. En febrero de
1818, al reinstalarse la República en Guayana, es designado Ministro de la
Suprema Corte de Justicia de Venezuela. En este cargo apenas durará poco más de
un mes, pues en mayo es comisionado para establecer y presidir la Corte de
Almirantazgo en Villa del Norte (hoy Santa Ana del Norte) en la isla de Margarita.
Esta Corte sería trasladada a La Guaira en agosto de 1821, y pocos días después
sería nuevamente mudada, esta vez a Caracas.
Al
iniciarse la institucionalización de la República de Colombia establecida desde
1819 y legalizada en el Congreso de Cúcuta de 1821, se establece la Suprema
Corte de Justicia en Bogotá, permaneciendo en Caracas la Corte Superior del
Distrito del Norte, en la que Francisco Javier Yanes actúa como uno de sus
ministros. Presidiría este cuerpo en 1826 en sustitución de Cristóbal Mendoza. En
1829, luego de ocupar varios cargos públicos, fue repuesto a la Corte Superior
del distrito del Norte en Caracas.
Su labor como periodista.
En
estas labores inicia en 1811 cuando fue designado Censor principal para
supervisar el periódico “El Publicista” que actuaba como órgano oficial del
Congreso. Posteriormente, como primer producto de lo que será una fructífera
asociación editorial con el ilustre Cristóbal de Mendoza, se produce el
periódico “El Observador Caraqueño”, cuyo primer número apareció el 1° de enero
de 1824, circulando hasta el 31 de marzo de 1825.
Otra
incursión en el periodismo fue cuando formó parte de la Junta Directiva del
semanario “El Constitucional Caraqueño”, el cual circuló desde el 13 de
septiembre de 1824 hasta el 25 de abril de 1825.
Su labor como historiador.
En
1826 inicia el Dr. Cristóbal Mendoza la labor de publicar la primera
recopilación documental sobre la historia de Simón Bolívar y de la Gran
Colombia, a la que de inmediato se asocia el Dr. Yanes, dando como resultado la
compilación titulada “Colección de
Documentos Relativos a la Vida Pública del Libertador de Colombia y del Perú,
Simón Bolívar, para servir a la historia de Sur-América”. Dos años después
ocurre la muerte del Dr. Mendoza, para entonces se habían publicado 15 tomos de
la obra, y queda al frente de esta empresa Francisco Javier Yanes hasta el año
1833 en que apareció el último de los 22 tomos. Si
bien en esta publicación no se estructura un sistema histórico ni se
interpretan fenómenos socio-culturales del pasado, incluso no se hace ninguna
narración de hechos ocurridos, ofrece en cambio una labor previa y necesaria a
la historia aplicada: la de recopilación, que en este caso lleva el blasón de
haber sido la primera en su tipo no solo en Venezuela sino también en
Suramérica; en la que el propio Libertador participó facilitando copias de
documentos de su archivo personal.
Pero
mucho tiempo atrás hacía que el Dr. Yanes venía preparando sus propios trabajos
históricos. A su paso por los diferentes puntos de la geografía nacional, iba
recogiendo abundantes datos y documentación para apoyar las interpretaciones históricas
que se proponía dar a la estampa. Parece que en la labor de redacción de estos
trabajos ocupó los años entre 1818 y 1826, en los cuales preparó los
manuscritos (notas, borradores y/o redacciones finales) de cuatro obras: Compendio de la Historia de Venezuela desde
su descubrimiento y conquista hasta que se declaró Estado Independiente Relación Documentada de los principales
sucesos ocurridos en Venezuela desde que se declaró Estado Independiente hasta
1821 Memoria Histórico-política sobre la Isla
Margarita, apoyada en documentos autógrafos, para servir a la historia de su
regeneración y a la mejora de su actual gobierno Historia de la
provincia de Cumaná, en la transformación política de Venezuela, desde el 27 de abril de 1810
hasta el presente año de 1821
y la Historia de Guayana.
Su Archivo.
Los
manuscritos de estas obras (gran cantidad de borradores, notas y apuntaciones
que luego hilvanaría para darle estructura a cada relato) más los documentos
que utilizó como fuente, incluso las galeradas o pruebas de imprenta de lo que
sería la segunda edición de la única obra que publicó en vida, fueron guardados
celosamente por el Dr. Yanes en su archivo, junto con documentos de la época
colonial y otros muchos más provenientes de sus diversas actuaciones como
funcionario público, destacando entre ellos los de la Corte de Almirantazgo desde
su establecimiento en Villa del Norte (1819) hasta su supresión en Caracas
(1822). Tras la muerte de Francisco Javier Yanes, ocurrida el 17 de junio de
1842, este voluminoso archivo quedó en custodia de sus deudos, primeramente de
sus hijos Francisco Javier y Emilio, luego de sus yernas Trinidad Ascanio de
Yanes e Isabel Martín de Yanes, y posteriormente de sus nietos.
A
este archivo en posesión familiar acudieron muchos de los historiadores
decimonónicos venezolanos: como el polémico Juan Vicente González, uno de los
pocos que refirió el archivo de Yanes como fuente de sus trabajos
histórico-biográficos:
“Tomamos estos datos de la Historia inédita del Dr.
Francisco J. Yanes. ¡Cuántos tesoros! ¡Cuántos hechos gloriosos encerrados en
esas páginas! Ordenó el escritor que no se publicase su obra hasta diez años
después de su muerte, y hace veintitrés que falleció sin que haya visto la luz
pública”.
Decimos
que Gonzáles fue de los pocos que citaron al archivo de Yanes como fuente de
sus obras históricas, porque muchos fueron los que, habiendo recibido la
deferencia de consultar dichos papeles por parte del propio Yanes o de sus
descendientes, luego “olvidarían” señalar la mina de donde extrajeron las
joyas; así lo expresa el historiador Caracciolo Parra Pérez:
“Puesto principal entre los autores de historia
venezolana, ocupa Francisco Javier Yanes. Sus obras Relación documentada de los
principales sucesos de Venezuela hasta 1821, la Historia de Cumaná y la
Historia de Margarita, inédita la última, han sido para otros escritores
cantera inagotable y, muchas veces, clandestina. Este prócer ha sido
literalmente pillado, con la circunstancia agravante de que quienes
aprovecharon sus narraciones no tuvieron cuidado de corregir los errores que
contienen, y de los cuales los asaltantes solo fueron indicados recientemente
por los doctores Mendoza y Lecuna, en el prólogo de la Relación, editada por la
Academia Nacional de la Historia.”
En
efecto, los historiadores y académicos Cristóbal L. Mendoza y Vicente Lecuna en
la introducción a la edición póstuma de esta obra Yanes que cita últimamente
Parra Pérez hacen alusión a uno de tantos trabajos históricos que utilizó los
escritos y documentos del archivo de Yanes sin indicar la fuente:
“Es interesante observar que, para escribir sus obras,
muchos de nuestros historiadores del siglo XIX tuvieron a la vista y aun
reprodujeron en parte los manuscritos de Yanes. Seguramente el propio autor o
su familia con posterioridad, los facilitaron a cuantos deseaban tomar datos. Muchos
periodos, por ejemplo, de la magnífica Historia
de Venezuela, obra de nuestro insigne
Rafael María Baralt, están indudablemente compuestos con informaciones tomadas
de esta relación”.
En 1940, por gestiones de Cristóbal Mendoza e
intermediación de Emilio Antonio Yanes con el resto de la parentela del prócer,
el Gobierno Nacional adquirió el voluminoso archivo de Francisco Javier Yanes,
con destino a ser resguardado en la Academia Nacional de la Historia. Esta
corporación comisionó al experimentado académico Vicente Lecuna para que
organizara este otro cumulo documental y procediera a su encuadernación. Como
resultado de esta labor se obtuvieron 35 tomos (38 volúmenes)
con los siguientes enunciados:
Tomo
|
Temática
|
I
|
La Colonia
1782-1799. Resoluciones, relaciones o índices de correspondencia, planes de
resguardo de las costas, etc.
|
II
|
La Colonia 1800-1817. Actuaciones sobre el
establecimiento de hospedajes para los oficiales del Ejército Expedicionario,
comunicaciones del Obispo de Mérida sobre detención de clérigos, relaciones
de reales despachos dirigidos a la Real Audiencia, etc.
|
III
|
La Colonia
1818-1829. Expedientes sobre reparación de fortalezas, comunicaciones a la
Real Audiencia, causas judiciales, etc.
|
III Bis
|
La Colonia
1818-1829. (Continuación del Tomo III).Comunicaciones a la Real Audiencia, documentos
relativos a la masonería, solicitudes y pedimentos, etc.
|
IV
|
Reales Cédulas y
Reales Ordenes 1724-1799.
|
V
|
Reales Cédulas y
Reales Ordenes 1782-1797.
|
VI
|
Reales Cédulas y
Reales Ordenes 1803-1826.
|
VII
|
Compendio de la
Historia de Venezuela desde su descubrimiento y conquista hasta que se
declaró Estado Independiente. Caracas, Imprenta de Antonio Damirón. 1840.
|
VIII
|
Compendio de la
Historia de Venezuela. Manuscritos para aumentar la obra y galeradas de lo
que sería la segunda edición, con notas y correcciones.
|
IX
|
Relación Documentada de los
principales sucesos ocurridos en Venezuela desde que se declaró Estado
Independiente hasta 1821. Borrador: parte de la guerra de independencia en Venezuela y América.
|
X
|
Relación Documentada de los
principales sucesos ocurridos en Venezuela desde que se declaró Estado
Independiente hasta 1821. Borrador: parte de la insurrección de 1811 en Carcas y Valencia.
|
XI
|
Documentos que
sirvieron para sustentar la narración de la Relación Documentada... En su mayor parte copias.
|
XII
|
Copia de la “Relación Documentada…”. Tomada de los
borradores y notas de Yanes, con correcciones de lenguaje. Mendoza y Lecuna
la identifican como escrita por Emilio Antonio Yanes, nieto del prócer.
|
XIII
|
Estudios
geográficos de Venezuela. Notas y descripciones de las provincias de Barinas,
Cumaná, Maracaibo, con algunos apuntes históricos.
|
XIV
|
Estudios de Yanes
sobre derecho y jurisprudencia. También algunos apuntes
históricos-geográficos sobre Cumaná y Margarita. Otros documentos.
|
XV
|
Estudios de Yanes
sobre derecho y jurisprudencia. También algunos apuntes
históricos-geográficos sobre Venezuela, Guayana y Perijá. Documentos sobre
los asesinatos y fusilamientos ordenados por Boves. Otros documentos.
|
XVI
|
Estudios de Yanes
sobre política, derecho, jurisprudencia e historia.
|
XVII
|
Asuntos
Eclesiásticos.
|
XVIII
|
Memoria Histórico-Política
sobre la Isla de Margarita.
|
XIX
|
Borrador de la Memoria Histórico-Política de la isla de
Margarita.
|
XIX Bis
|
Continuación del
Tomo XIX. Borradores y notas de la Memoria
Histórico-Política sobre la Isla de Margarita. Observaciones hechas por
Francisco Esteban Gómez a la Historia de Margarita escrita por Yanes.
Documentos que sirvieron de fuente a esta obra de Yanes.
|
XX
|
Historia de
Cumaná. Apuntes documentados sobre la historia de la provincia de Cumaná
escritos por Francisco Javier Yanes y recopilados por Emilio Antonio Yanes.
|
XX Bis
|
Documentos
relativos a la Historia de Cumaná.
|
XXI
|
Corte de
Almirantazgo. Comunicaciones a la Corte, cuadernos copiadores de esta, actas
1 a 20 de la plenaria de la Corte.
|
XXII
|
Corte de
Almirantazgo. Actas 1 a 19 de las plenarias de la Corte, cuadernos copiadores,
comunicaciones a la Corte, etc.
|
XXIII
|
Corte de
Almirantazgo. Comunicaciones a la Corte, cuadernos copiadores de esta,
borradores de comunicaciones, representaciones de la Corte, etc.
|
XXIV
|
Corte de
Almirantazgo. Comunicaciones a la Corte, cuadernos copiadores de esta, cartas
en francés de Nicolás Joly al Presidente de la Corte, representaciones de la
Corte, copiadores de actas de la Alta Corte de Justicia, documentos sobre el
bloqueo de las costas de Venezuela, etc.
|
XXV
|
Corte de
Almirantazgo. Actas de la Alta Corte de Justicia, comunicaciones a la Corte
de Almirantazgo, representaciones a la Corte de Almirantazgo, etc.
|
XXVI
|
Nociones de
Derecho Marítimo. Estudios y notas de Yanes sobre el derecho marítimo, comunicaciones
a la Corte de Almirantazgo, carta de Carlos F. Grisanti a Emilio Antonio
Yanes sobre los trabajos de derecho marítimo de Francisco Javier Yanes
(18/03/1920), nota de Emilio Antonio Yanes sobre el prólogo de la obra de
Francisco Javier Yanes, copias mecanografiadas de los documentos manuscritos
de este tomo, etc.
|
XXVII
|
Apuntamientos
sobre la Legislación de Colombia. Apuntes de Francisco Javier Yanes sobre la
Constitución y el Congreso de Colombia, Actas de la Municipalidad de Caracas
sobre la Constitución de Colombia, copias mecanografiadas de varios
documentos de este tomo, etc.
|
XXVIII
|
Cartas de
Próceres- Biografías. Cartas a Francisco Javier Yanes de Juan Bautista
Arismendi, Lino de Clemente, Ramón Ignacio Méndez, José Antonio Páez y otros; relación de las hazañas de Mac
Gregor y Piar, datos biográficos sobre Antonio Ascanio, Pedro Gual, Gerónimo
de Ustáriz, Telésforo de Orea; carta de J. M. Restrepo sobre orden del Libertador
de enviar a Yanes copias de documentos; fe de bautismo, de confirmación y
documentos sobre limpieza de sangre de Yanes, notas y constancias de los
sueldos que se le deben y los pagados, etc.
|
XXIX
|
Relaciones
Históricas- Congresillo de Cariaco. Comunicaciones del primer agente de
Venezuela en los Estados Unidos, Telésforo de Orea, a varias autoridades;
relación de los sucesos ocurridos en Valencia en 1814 por Juan Escalona y
Miguel Peña para Yanes, relaciones de varios episodios de la guerra de
independencia escritos para Yanes por José Tadeo Monagas, Feliciano
Montenegro Colón, José Manuel Olivares, Josef Paúl, Eduardo Stofford, Pedro
Zaraza; decretos de Luis Brion, etc.
|
XXX
|
Guerra de
Independencia en Venezuela- República de Colombia. Apuntes de Yanes sobre
actuaciones de las Cortes Nacionales, Consejo de Regencia y Audiencia;
juicios de infidencias a varios, comunicaciones y decretos de Luis Brion,
cartas a Yanes, comunicaciones al Presidente de la Corte de Almirantazgo, comunicación
a Yanes sobre su nombramiento como Fiscal de la Corte de Justicia en Bogotá,
rechazo al cargo anterior, etc.
|
XXXI
|
Corte de
Justicia/ Colombia 1821-1830/ Venezuela 1830-1851. Actas de la Alta Corte de
Justicia, recusaciones, recursos de nulidad, sentencias, confirmaciones de
sentencias, consultas a la corte, contestaciones de Yanes a estas consultas,
etc.
|
XXXII
|
Marina-Brion y
Clemente. Oficios del almirante Luis Brion a varios, oficios de Lino de
Clemente al Presidente de la Corte de Almirantazgo, representaciones y
comunicaciones de Guillermo Robinson al Gobernador y Capitán General sobre
derechos mercantiles y reclamos (1805), etc.
|
XXXIII
|
Impresos
1801-1830.
|
XXIV
|
Impresos 1801-1830.
|
XXXV
|
Historia de la
Corte de Almirantazgo. Apuntes para la Historia de la Corte de Almirantazgo
escritos por Emilio Antonio Yanes, Reseña Histórica sobre la Corte de
Almirantazgo, documentos complementarios de la reseña,
|
Según
describen las contraportadas de los tomos antes señalados, en los trabajos de
organización
de los documentos de este voluminoso archivo participó junto a Vicente Lecuna
la experta paleógrafa Esther Barret de Nazarís. En este punto debemos señalar,
sin embargo, varios errores que se cometieron cuando se encuadernaron los
documentos que hoy pueden dificultar la investigación. En primer lugar,
destacaremos uno muy frecuente a la hora encuadernar manuscritos anteriores al
siglo XX, y es el hecho que no se dejó suficiente margen entre la escritura y
el borde donde se realizó la costura de los legajos y folios, dando como
resultado que muchos documentos queden parcialmente ocultos entre las juntas de
encuadernación y su lectura completa, en algunos casos, se haga imposible. Otro error común, aunque menos frecuente verlo en los varios trabajos que de este tipo
realizara la dupla Lecuna-Barret de Nazarís, es que muchos folios fueron
intercalados donde no correspondía, dejando una o varias hojas de un documento
dispersas entre otros sin relación, dando como resultado que se rompa la
continuidad original, el sentido de la lectura y dejando la sensación de que el
documento está incompleto cuando lo que realmente ocurres es que se encuentra
disperso; incluso encontrándose partes de un mismo documento en varios tomos.
Esto puede verse, por ejemplo, en el borrador de la Representación de la Corte
de Almirantazgo en el que se reclama lo escaso de las remuneraciones asignadas
al Presidente y Fiscal de dicho cuerpo, el cual inicia en los folios 17 al 18
del tomo XXII y concluye en los folios 115 al 116 del mismo tomo; o la
solicitud de suspensión de imposición de cuotas mensuales a varios vecinos que
hace el Teniente Justicia mayor del pueblo de Maracay, que parte del folio 165
quedando inconcluso en el 170 del tomo III y la parte final se encuentra en los
folios 223 y 225 del tomo III bis.
Resultado
de la labor del Departamento de Investigaciones Históricas de la Academia
Nacional de la Historia, Herminia Méndez Sereno publicó el Índice de Títulos de
este voluminoso archivo, inserto en su trabajo “
El Almirantazgo Republicano 1819-1822”, volumen 89 de la serie
Fuentes para la Historia Republicana de
Venezuela, páginas 193 a 490; seguido de un Índice Onomástico y de otro Analítico-Geográfico.
Este instrumento de consulta permite recuperar la información que ofrece el archivo
de Francisco Javier Yanes describiendo cada uno de los documentos de un tomo mediante
la asignación de un título que indica, generalmente: el nombre de personas,
lugares, asunto, fechas y números de folios que intervienen en la creación del
documento en cuestión. Que los investigadores cuenten con este tipo de
instrumentos de descripción fuera de los espacios del archivo que conserva los
documentos, facilita en gran medida la localización de determinado documento,
reduce la manipulación de los originales que por más que se traten con sumo
cuidado, siempre se verán afectados por esta, y ahorra mucho tiempo al
investigador y espacio a los archivos. Sin embargo, en este caso particular, se
obvió alguna información indispensable tanto para el investigador como para el
control interno del archivo, y es que al momento de describir la gran cantidad
de manuscritos que conforman el archivo Francisco Javier Yanes, en muchísimos
casos no se detalló si se trata de un original o una copia; y en el caso de las
copias si estas son autenticadas o simples, coetáneas o posteriores.
La calificación de padre de la historia venezolana para Francisco Javier Yanes le fue
dada por otro acucioso cultivador del arte de Clío, Vicente Lecuna: “El Dr. Francisco Javier Yanes es el padre de
nuestra historia. Él fue el primer venezolano que logró formar una colección de
documentos históricos y junto con el Dr. Cristóbal de Mendoza publicó la ´Colección
de Documentos para la vida pública del Libertador de Colombia y del Perú, Simón
Bolívar´”. Si bien el hallazgo
de posteriores datos haría corregir a Lecuna el origen de la publicación de la “Colección de documentos…”, es un hecho
que Yanes fue el primero que publicó una historia venezolana inspirado en la
concepción de “historia patria” que se forjó en el siglo XIX. Que hoy se conserve
el conjunto documental por él producido y reunido enriquece nuestro patrimonio
documental; y brinda una herramienta de capital importancia, pues las fuentes
originales son indispensables para el historiador ya que hacen científica a la
disciplina, permiten descubrir, estudiar y analizar circunstancias, fenómenos y
hechos en el abordaje histórico.
La nacionalidad venezolana, surgida a partir del 5 de julio de 1811 y ratificada con la Constitución Federal de dicho año, arropó a un ...